

La verdad tritura la ficción
El departamento de contenidos y medios tiene el objetivo de explicar qué es 11Onze o, mejor dicho, enseñarlo. Enfoca la comunicación de la empresa transmitiendo sus valores y ganas de cambiarlo todo.
Toni Mata, director de contenidos y medios de 11Onze
¿No te molesta cuando cualquier banco o empresa que quiere venderte algo te trata como si tuvieras problemas de comprensión? ¿Como si el público, el cliente potencial, fuera un rebaño al que se le deben dar unas indicaciones concretas para que entre dentro del cercado? A mí me cabrea mucho. Y creo que los ciudadanos (para las empresas: los consumidores) ya empezamos a tener cultura audiovisual suficiente para entender cuándo nos están intentando tomar el pelo y cuándo no.
Mi trabajo al frente del departamento de contenidos y medios de 11Onze va en otra dirección. Me gusta que seamos útiles, me gusta que expliquemos las cosas tal y como son, me gusta que seamos imprevisibles. Por eso no contratamos carísimas agencias de publicidad que nos convencerían de ideas supuestamente modernas pero preconcebidas, con una fotografía perfecta y unos actores guapísimos. No hacemos esto. No nos interesa. Ya lo hacen todos los demás. Y da un poco de risa, la verdad.
Dejadme contarlo con ejemplos. Cuando La Caixa hace un anuncio que parece una peli universitaria yanki en la que nos habla de un chico al que han ayudado y que no sabe si hacerse cantante de ‘trap’ o jugar al fútbol americano… está muy bien, pero es mentira. Soy de Sabadell y esto está rodado en las pistas de la JAS (Juventud Atlética de Sabadell), con las preciosas hoces que abre el Ripoll al fondo. El problema es que en Sabadell no hay ningún equipo de fútbol americano y que en los equipos de rugby de la ciudad (que están en la otra punta de Sabadell, no allí) no consta este chico.
Pero, si buscas a Munic HB, verás que sí le va muy bien en la música, aunque, claro, esta quizá no sea la imagen que quieren los promotores del anuncio. Es el barrio de Les Termes de Sabadell, que se parece más al Baltimore de The Wire que al upper Diagonal de los directivos de la entidad valenciana. Total: que todo es mentira. Que se han gastado una pasta para contarnos un cuento de hadas porque la verdad, la realidad suburbial, no debe gustarles.
Un baño de realidad
Aquí somos distintos. En 11Onze enseñamos realidad. ¿Bonita? ¿Fea? Eso da igual, es la que tenemos. No es solo La Caixa quien hace esto, lo hace todo el mundo, en una lamentable carrera por edulcorar el mundo en lugar de hacerlo comprensible o transformarlo.
Estos son para mí los ejes de la comunicación de 11Onze. Para empezar, utilizamos el Magazine, 11Onze Podcast, 11Onze TV y Aprender para entender cómo funciona la economía, cuáles son los mecanismos del mundo financiero. Porque, nos guste o no, es la música que suena. Por tanto, vale más que aprendamos a bailarla.
Una vez la comunidad sea suficientemente grande, ya intentaremos cambiar la música. Porque el siguiente paso es transformar la realidad, pero eso sí que deberemos hacerlo entre todos. Por eso nuestros trabajadores hacen el esfuerzo de hacernos abarcables temas de interés, para poner sobre la mesa conocimientos que debemos tener. Y por el mismo motivo transformador nos gusta contar con voces jóvenes como las de Pasta Z o con gente que pone en marcha ideas en las que cree y que vamos descubriendo en Impulsores. Esto es lo que queremos: personas que miran al mundo, se cuestionan qué pueden hacer y se ponen a construirlo. De abajo arriba.
Aversión a la mentira
Veréis, es que soy escritor, de formación periodista y de trayectoria guionista de programas de entretenimiento. Es un revoltijo extraño, lo sé. Lo digo para que se comprenda mi absoluta aversión hacia la artificiosidad y la mentira. Cuando un escritor escribe desde el corazón, cosas que le importan, se nota. Cuando un periodista explica los hechos, es diáfano, no necesita retorcer la explicación. Cuando un guionista es divertido, la gente se ríe o no se ríe. Pues, para mí, el funcionamiento empresarial debería seguir estas directrices: si lo que hace tu empresa es bueno para la gente, hazlo. Si no, cierra. Si lo que debes decir es verdad, dilo. Si no, cierra. Si quieres contar una historia, que sea interesante. Si no, cierra. No me hagas perder el tiempo.
Por eso para mí la verdad no es que supere la ficción, es que la tritura. La mentira (en banca, en publicidad, en política, en marketing) ha hecho demasiado daño y ha envilecido la comunicación. Demasiado. Ya no sabemos lo que es verdad y lo que es mentira. Los mensajes corporativos y la desinformación se mezclan en una amalgama inseparable, por eso pusimos en marcha 11Onze Check, porque ya basta de este putiferio donde se acuestan la banca y los medios continuamente. Tenemos derecho a que no nos engañen.
El peso del documental
En definitiva: mi reto es bastante divertido, entre otras cosas porque puedo ver cómo el antiguo modelo se desangra intentando hacer lo que nosotros hacemos, que les es antinatural. Nosotros solo tenemos que poner cámaras en el día a día de 11Onze, dando mucho peso al documental. Con L’Academy enseñamos cómo formábamos a los trabajadores, con Conociendo descubrieron los primeros jefes de 11Onze, con En 4 días enseñamos el proceso de lanzamiento de El Canut y destapamos todas las trabas que nos puso la banca tradicional. ¿Qué más haremos? Seguir contando esta historia. Apenas estamos en la primera temporada.
Hemos venido a aprender, a crecer juntos, a triturar las mentiras y a cambiar lo que no nos gusta. Y, además, lo haremos con fiesta, bailando rumba. ¿Habías visto alguna vez una entidad financiera anunciada por gitanos? Bien, pues hemos venido a hacer cosas que no se han hecho nunca.
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Contingut molt dinamic i atraient. Felicitats
Moltes gràcies Toni, crec que la comunitat t’ho agreix molt. El que fas/feu a 11onze.👏
Gràcies, Carles, és tot un plaer sempre treballar per la comunitat i sobretot amb persones com en Toni. Genial!
Toni així fas que la vida sigui més fàcil de portar!
Me n’alegro, doncs!
Ets un crac Toni , Gràcies 👌🏽
Magistral 🙏🏿
Em trec el barret, Toni.
Pel que dius i per com ho dius.
Gràcies,
Un cop trets els barrets, a veure si aconseguim que altres es treguin la màscara. Gràcies Mercè!