Ray Dalio pronostica un colapso financiero

El inversor norteamericano vuelve a avisar de que los Estados Unidos están en peligro de un colapso financiero porque se está generando demasiada deuda y hay escasez de compradores. Además, apunta que la inflación, los bajos tipos de interés y la fragmentación política empeorarán la situación.

Ray Dalio, reconocido inversor y fundador del fondo de inversión Bridgewater Associates, hace meses que va avisando del peligro de un colapso financiero. Durante las negociaciones sobre el techo de deuda para evitar una suspensión de pagos de la administración americana, Dalio explicaba en un post en LinkedIn que no había suficiente con acordar un nuevo límite de deuda si no se concretaba como contener o reducir el gasto y que “aumentar el límite de deuda de la manera en que el Congreso y los presidentes han hecho repetidamente conducirá finalmente a un colapso financiero desastroso”.

De hecho, no hay que ser un gurú de las finanzas para saber que gastar más de lo que ganamos y financiarlo con deuda es la receta perfecta para el desastre económico. Esto, pero, no es necesariamente siempre verdad si tienes la capacidad de imprimir dinero sin consecuencias. La hegemonía del dólar como moneda de reserva mundial y la demanda asegurada de esta divisa gracias al reciclaje de petrodólares otorga a los Estados Unidos una de facto “tarjeta black” que les permite gastar dinero sin demasiadas preocupaciones.

Cuando no se puede satisfacer a los deudores y acreedores

Todo y este comodín, el fundador de Bridgewater apunta que a la larga no es sostenible, porque el aumento de los activos y pasivos de deuda más rápido que los ingresos acaba por hacer imposible pagar un tipo de interés que satisfaga los acreedores, y al que puedan hacer frente los deudores. Es decir, los tipos de interés tienen que ser suficientemente altos para que el acreedor obtenga un buen rendimiento por su dinero, pero no hasta el punto de que el deudor no pueda pagar su deuda.

Así mismo, argumenta que este escenario puede conducir al pánico y acabar creando una crisis de deuda parecida a la reacción en cadena que precede a las crisis bancarias, pero en este caso contra el banco central y con bonos del gobierno. Una situación que describe como desastrosa que “causará un desastre financiero y trastornos sociales”

En este contexto, el inversor cree que nos estamos acercando a este punto de inflexión en que la cantidad de deuda emitida por el gobierno superará la demanda, lo cual obligaría a una impresión ingente de dinero y una venta de bonos gubernamentales que pondría al banco central en una posición insostenible. En otras palabras, los acreedores no prestarán más dinero y venderán sus activos de deuda -provocando una subida de los tipos de interés- o forzarán que el banco central imprima más dinero y compre deuda en un intento de mantener los tipos de interés bajos, por lo tanto, creando inflación y provocando una contracción de la actividad económica.

Como evitar o prepararse para el colapso

“Creo que se tiene que reformar el sistema y dar una respuesta expeditiva con un bipartidismo inteligente”, apunta Dalio en una entrevista en Bloomberg. Y añade, “Si seguimos por este camino, en términos de lo que es probable en los próximos cinco y diez años, se llegaría a un punto en el cual este acto de equilibrio se hace muy difícil”.

En cualquier caso, estas medidas o cambio de paradigma dependen en gran parte de los políticos, sobre los cuales la población no tiene mucha influencia independientemente de los resultados electorales. Hay que recordar que los intereses de la banca y de los poderes fácticos tienen prioridad por encima de los de la ciudadanía. Ante una crisis financiera solo una minoría selecta tiene acceso a información privilegiada que le permite asesorar la gravedad de la situación para proteger sus ahorros.

Entonces, ¿cómo podemos proteger nuestras finanzas ante un desastre económico que parece más que probable? Ray Dalio lo tiene claro, aunque reconoce que posee una “pequeña” cantidad de bitcoin, prefiere el oro, al que describe como “universal y atemporal”, y continua “no entiendo por qué la gente se inclina más por el bitcoin que por el oro. Si nos fijamos en el ámbito internacional, el oro es, para los bancos centrales, el tercer activo de reserva”. Y es que en este contexto económico la compra de oro es una de las pocas opciones que tienen, no solo los bancos, sino, la gente para salvaguardar su dinero.

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