El arte digital es capaz de cualquier cosa: ha batido el récord al venderse una obra de arte por 69 millones de dólares.

Gracias a la unión de arte y tecnología se han abierto nuevos sentimientos humanos que han hecho que se pueda vivir el arte de una forma mucho más intensa incluyendo herramientas nuevas mucho más interactivas.

El mundo del arte evoluciona con nuevos recursos para llegar a todos los públicos, y con la tecnología consigue hacernos sentir lo que el arte quiere expresar; las luces, la perspectiva y el sonido nos pueden desplazar a otra dimensión.

En 1826, Joseph Nicéphore Niepce comenzó a vincular fotografía y arte al hacer las primeras copias fotográficas de obras pictóricas y al intentar plasmar la realidad con un sentido artístico, más allá de la mera captación de imágenes.

Entendemos el arte como la actividad en la que el hombre recrea, con una finalidad estética, un aspecto de la realidad o un sentimiento en formas bellas, valiéndose de la materia, la imagen o el sonido.  Si hablamos de tecnología, la podemos definir como la búsqueda de satisfacer las necesidades y los deseos humanos. La tecnología busca resolver problemas prácticos usando en parte la ciencia.

Nuevas tecnologías, nuevas perspectivas

El arte y la tecnología siempre han existido como unión, pero hoy en día es mucho más evidente la vinculación entre ambos. Y si eso se ha conseguido es gracias al uso de desarrollos tecnológicos cada vez más sofisticados.

Una de las técnicas más innovadoras, ha sido el video mapping, donde se utilizan proyectores de vídeo para desplegar una animación o imágenes sobre superficies reales consiguiendo un efecto artístico y fuera de lo común. Esta técnica se basa en los movimientos que crea la animación (2D y 3D) sobre dicha superficie.

El mapping más conocido es el que vemos sobre los edificios monumentales acompañados de sonidos para efectuar un mayor espectáculo.

Con esta técnica se ha permitido interaccionar con el público y se crea una relación con el arte, la tecnología y la sociedad.

Muchas marcas han conseguido llegar a su público objetivo mediante esta técnica. Han recreado, por ejemplo, una pieza de alta joyería para que no solo el público vea la joya expuesta, sino cómo adentrarse en ella, para tener una percepción distinta.

Atrás quedaron las proyecciones planas. El mapping puede proyectar sobre objetos del mundo real, como un edificio, y plasmar imágenes en sus paredes sin ningún tipo de distorsión.

Mapping en Barcelona con motivo del “Llum BCN Festival de 2016”.

Lo último y más revolucionario

El auge del arte digital está imparable y recientemente se ha batido el récord. El artista digital multimillonario Mike Winkelmann, conocido como Beeple, ha hecho posible que su obra de arte se haya vendido por 69 millones de dólares. La tecnología que lo ha hecho posible tiene nombre propio: NFT (Non Fungible Tokens).

Winkelmann lleva más de 15 años haciéndolo, pero ha sido ahora que ha conseguido que su collage de 5.000 imágenes lo posicione como el artista digital más cotizado.

¡Lo nunca visto! El pasado 25 de febrero, su obra salió a subasta por un precio inicial de 100 dólares; en una semana, su cotización llegó a alcanzar 14 millones, pero lo que no se esperaba Mike es que llegase a la cifra de 69 millones de dólares. La obra que ha conseguido alcanzar esta cifra es: “Everydays – The First 5000 Days”. Dicho por el autor, es una obra donde “las piezas individuales están organizadas en un orden cronológico impreciso: al acercar las imágenes, se revelan imágenes abstractas, fantásticas, grotescas o absurdas, profundamente personales o representativas de la actualidad”.

Comparando el pasado con el presente, “Los lirios” al óleo sobre lienzo de Van Gogh, que subastó también Christie ‘s, se vendió por 20 millones de dólares menos que la obra de Beeple.

Otras formas de poder crear arte

Hablamos con Alfredo Acosta, arquitecto, que nos comenta que la arquitectura y la luz están muy de moda. Él tiene un nuevo proyecto personal que está enfocado al espacio que se genera con la luz. El objetivo es descubrir nuevos espacios diferentes a los que estamos acostumbrados. Nos pone el ejemplo de la tipografía: si agrandamos una letra, si aumentamos  14 veces de escala, se está generando un espacio, nos podemos introducir en la letra y, si la iluminamos de una manera sincronizada con la persona que estuviese habilitando el espacio de la letra, a través de sensores, podríamos conseguir estas sensaciones, para que puedan interactuar persona, espacio y luz.

En breve tendremos más detalles sobre su exposición. ¿Te imaginas poder descubrir qué hay por dentro de la inicial de tu nombre?

Dónde ver arte digital

Si estás en Barcelona, no te pierdas el espacio IDEAL, un laboratorio creativo que tiene como objetivo la investigación, creación y desarrollo de la tecnología aplicada a entornos y experiencias inmersivas como la realidad virtual o la realidad aumentada, entre otros. Actualmente podrás ver KLIMT: una producción inmersiva de gran formato centrada en la obra del pintor modernista.

Klimt, la experiencia Inmersiva a IDEAL.

Y en el mismo espacio se lleva a cabo el Kabaret Fledermaus (cabaret del Murciélago), que los autores crean como “una reivindicación del mítico cabaret vienés de principios del siglo XX a través del arte, la música, la tecnología y la ciencia”. En este espacio, la tecnología consigue crear una experiencia para adentrarse en el arte con los cinco sentidos.

Seguro que, después de haber leído este artículo, ya no piensas que el arte es aburrido y difícil de entender. Disfruta del arte digital y adéntrate en obras cuyo autor probablemente nunca pensó que se pudiesen visualizar de esta manera.

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