¿Has oído hablar del término ‘Slow Travel’? Es un estilo de viajar que se centra en la calidad de las experiencias en vez de la cantidad de lugares visitados. Disfrutar cada paso del camino, conectar con la cultura local y ser consciente de tu impacto en el medio ambiente.

En vez de planear un itinerario frenético de visitas, ‘Slow Travel’ implica tomarse su tiempo para conocer y apreciar cada lugar, contemplando la posibilidad de conectar con la cultura local y las personas que viven en el lugar. Una manera de ver el mundo que se opone al estilo de ‘viajar como un turista’, que a menudo comporta visitar muchos sitios con el tiempo justo para comprar la ‘postalita’ o hacer la foto de rigor para colgar en Instagram.

Esta manera de viajar también implica que seamos conscientes de nuestro impacto en el medio ambiente. Esto significa tomar decisiones pensando en como las actividades que se realizan, los lugares que se visitan y la forma en que se viaja afectan el entorno natural. La elección de modos de transporte y alojamientos más sostenibles, así como las actividades de ocio que practicamos o el consumo de productos locales, pueden contribuir a evitar que un turismo de masas destruya los paisajes que visitamos.

Además, también puede ser una oportunidad para desconectar de la vida moderna y sus ritmos intensos. Puede ser una manera de encontrar la paz interior y conectar con uno mismo, así como la ocasión perfecta para aprender y crecer como persona. Entonces, ¿cómo podemos practicar el ‘Slow Travel’?

Turismo y vacaciones de proximidad

En los dos últimos años se ha popularizado el turismo de proximidad, una tendencia por explorar lugares de nuestro propio país. A menudo, lugares que tenemos a la vuelta de la esquina son los que pensamos visitar “algún día”, pero solemos dejarlos al final de la lista en favor de algo más exótico. Así que, ¿por qué no hacer de hoy ese “un día” y visitar una ciudad o lugar de nuestro territorio? Las joyas ocultas están a nuestro alrededor si estamos dispuestos a explorarlas.

Piensa ‘eco’ y haz camino al andar

Reservando hoteles con etiqueta ecológica, puedes ayudar a minimizar el impacto de tus vacaciones en el planeta sin dejar de disfrutar del placer de viajar. Haz tu lista de reproducción, pilla unos aperitivos, trae a un buen amigo o amiga y emprende el camino hacia…., bueno, ¡cualquier sitio! Como viajeros, a menudo preferimos las capitales a las segundas o terceras ciudades más populares. Pero en esas otras ciudades es donde ocurre la magia, ya que suelen ofrecer experiencias menos turísticas y más auténticas. O mejor aún, para tu próximo ‘Slow Travel’, evita totalmente las ciudades y considera la posibilidad de explorar lo inexplorado.

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